También conocida como catedral de Cristo Salvador, la catedral de Ávila es considerada la primera catedral gótica de nuestro país, aunque también tiene elementos románicos e influencia defectiva.
Siendo un edificio con múltiples estilos e influencias, es uno de los lugares más importantes de Ávila y merece mucho la pena hacer una visita. Hoy te contaremos más sobre ella, incluyendo su historia, su interior, sus influencias y también cómo hacer visitas guiadas.
Descubre la catedral de Ávila
Antes de visitar la catedral, debes saber lo siguiente:
- Historia
- Interior
- Visitas guiadas
- Estilos e influencias
Historia
La historia de la catedral de Ávila comienza en el siglo XI o XII. Algunos historiadores creen que se construyó sobre la iglesia mozárabe de San Salvador en el siglo XI, pero la teoría predominante es que se construyó en el siglo siguiente por Giral Fruchel, siendo el que construyó la parte más antigua, es decir, su cabecera.
Fue Fruchel el que trajo los primeros elementos góticos directamente de Borgoña en el siglo XII. Del siglo XIII al XIV, se iniciaría una nueva fase de obras, con reformas del cruce, el claustro y sacristías, todo a manos de Sandro Blázquez Dávila, que impulsó unas obras en plena época del gótico. En el siglo XV se terminaron las obras, construyendo un reloj mecánico y construyéndose varias capillas en siglos posteriores, además de su altar mayor del siglo XVI.
Interior de la catedral de Ávila
Como es considerada la primera catedral gótica de nuestro país, se notan mucho las influencias del mismo en el interior. La nave principal, flanqueada por dos naves laterales, lleva la mirada del visitante hacia el impresionante ábside. Las vidrieras, algunas de las cuales datan del siglo XIII, tiñen el espacio con colores cálidos, creando una atmósfera etérea.
El retablo mayor, obra renacentista del siglo XVI, es una maravilla artística que relata diferentes episodios de la vida de Jesucristo. Las diversas capillas que se esparcen por el interior de la catedral albergan tesoros como esculturas, pinturas y relicarios, que reflejan la devoción y el esplendor artístico de épocas pasadas.
Visitas guiadas
Es posible realizar visitas guiadas al interior de la catedral de Ávila. Suelen abordar desde los aspectos más técnicos y artísticos de la catedral, como la evolución de su construcción y las obras maestras que alberga, hasta historias y leyendas que se han tejido en torno a este monumento. Es una excelente manera de sumergirse en la esencia de Ávila y su patrimonio.
Los horarios son de lunes a sábados de 10 a 20:00 y el domingo de 12:30 a 20:00 (el último acceso es media hora antes porque es lo que dura la visita). Para acceder a la torre, se accede a las 12:00, 13:00, 17:00 y 18:00 de lunes a sábado y el domingo a las 13:00,17:00 y 18:00.
En cuanto a los precios, se paga una entrada general de 8 euros, con suplemento de 3 euros para subir a la torre. Para mayores de 65 baja a 7; los universitarios, personas con discapacidad y menores de 12 a 17 pagan 6,50. Por otro lado, los grupos de 20 o más personas pagarán 5 euros. Finalmente, los menores de 12 años, abulenses, sacerdotes y discapacidad superior al 64% entran gratis los martes y miércoles no festivos de 8:30 a 9:30, aunque sí que seguirán pagando el suplemento para subir a la torre.
Estilos e influencias de la catedral de Ávila
La catedral del Cristo Salvador es un compendio de estilos y tendencias arquitectónicas. Si bien fue la primera catedral gótica, con el paso de los siglos se incorporaron algunos elementos, como el retablo renacentista, además de los elementos románicos del principio.
El ábside, de forma semicircular y con gruesos muros, es un claro ejemplo del románico, mientras que las bóvedas de crucería y los altos pilares apuntados son representativos del gótico. El retablo mayor y algunas de las capillas laterales muestran influencias renacentistas, evidenciando cómo la catedral ha sido un reflejo de las tendencias artísticas de cada época.
Además, es importante destacar la influencia militar en su diseño. Al estar adosada a la muralla y servir como parte defensiva de la ciudad, ciertos elementos, como almenas y bastiones, se incorporaron en su arquitectura, dándole ese carácter tan particular de fortaleza y templo sagrado al mismo tiempo.
