Molinaseca es un pueblo de la provincia de León, perteneciente a la comarca de El Bierzo. Es una pequeña localidad de menos de 1000 habitantes, pero muy importante por su gran historia. De hecho, está ocupada desde la época romana y es Conjunto Histórico-Artístico, además de un lugar de paso del Camino de Santiago en su parte francesa.
Como un lugar histórico, tiene varios lugares icónicos que deberías visitar. Eso incluye iglesias, casas con una gran historia detrás, monumentos e incluso lugares que datan de la antigua Roma.
6 actividades en ensueño en Molinaseca
Si vas a visitar esta localidad, no te puedes perder estas 6 paradas:
- Santuario de Nuestra Señora de las Angustias
- Puente Romano
- Iglesia de San Nicola de Bari
- Calle Real
- Casa Palacio de Cangas y Pambley y casa “con la marca”
- Plaza del Santo Cristo
Visitar el Santuario de Nuestra Señora de las Angustias
El primer lugar para ver en Molinaseca es el Santuario de Nuestra Señora de las Angustias. Se trata de una ermita situada justo a las afueras del pueblo, siendo de origen barroco. Destaca su enorme torre campanario y su templo, el cual sirvió en su día como hospital y albergue para los peregrinos.
El interior es aún más destacado, con bóveda de arista y una gran cúpula. Vemos un altar dedicado a Nuestra Señora de las Angustias, con un retablo espectacular.
El puente romano de Molinaseca
El puente romano de esta localidad está situado al lado del casco histórico de la localidad y es un paso obligatorio para los peregrinos (por eso también se llama Puente de los Peregrinos). En realidad, no todo el puente es romano, sino únicamente los tres primeros arcos, los cuales ahora están sobre el asfalto. La razón es que el río ha variado su cauce, así que se tuvieron que hacer cuatro nuevos arcos en la edad media para poder cruzar al otro lado.
Además, hay que destacar la playa fluvial del río Meruelo, la cual sirve como zona de baño a los visitantes y a los locales.
Ver la Iglesia de San Nicola de Bari
Si te desvías un poco del camino principal, podrás conocer la Iglesia de San Nicolas de Bari en Molinaseca. Se trata de un templo barroco en transición al estilo neoclásico, situado a las afueras de la localidad, en concreto, sobre una pequeña loma.
Tiene una torre campanario en honor a San Nicolás de Bari, algo que se puede ver en su escultura. El interior es muy luminoso, con bóvedas de aristas y coro alto. La decoración barroca está muy bien conservada, con San Nicolás en el centro representado como obispo, con un Cristo Resucitado en el retablo.
La Calle Real de Molinaseca y el Camino de Santiago Francés
Sin duda, el principal atractivo de esta localidad es el Camino de Santiago, en concreto, la parte francesa. La Calle Real es la que coincide con esta parte del camino y la que atraviesa todo el casco urbano del pueblo. Por este motivo, aquí se encuentran la mayoría de tiendas y supermercados de la zona, ya que sirven de servicio de los peregrinos.
Las dos casas que no te puedes perder en esta localidad
En Molinaseca hay dos casas que llaman la atención sobre todas las demás. La primera es la Casa Palacio de Cangas y Pambley, declarada Bien de Interés Cultural. Podrás ver los escudos nobiliarios de la familia Cangas-Pambley.
La segunda casa es la llamada casa “con la marca”. Es una antigua casa rehabilitada en la calle mayor, la cual tiene una particular marca en los laterales. Según dicen las leyendas, fue ocupada por los reyes de León cuando pasaban por la zona. En la actualidad, es una residencia particular, aunque no deja de ser algo llamativo que visitar.
Plaza del Santo Cristo
Esta plaza es una zona muy conocida en el pueblo. Aquí podrás encontrar no solo una bonita zona ajardinada, sino otros elementos muy interesantes. No hay que confundirla con la Plaza García Rey, la cual es adoquinada y posee el ayuntamiento de la localidad.
Una de ellas es el un monumento al peregrino, con una escultura de 1995 que representa a Santiago peregrino. Además, también podrás ver un crucero de Santo Cristo.
También hay que destacar el monolito de un metro de altura, que sirve de hermanamiento con Shikokuy. Se colocó porque está hermanada con el camino japonés de Shikoku Henro. Este monolito no es lo único japonés en Molinaseca, ya que hay una escultura hecha en un nogal vivo llamada “El Buda de Molinaseca”, representando a Kannos, la versión femenina de Buda.
