Uno de los lugares más destacados de la comarca de El Bierzo son Las Médulas. Reconocido como Bien de Interés Cultural, Monumento Natural y Patrimonio de la Humedad por la Unesco, no solamente es una muestra de la ingeniería romana, sino que el pasaje resultante merece mucho la pena.
Hoy veremos más sobre este paisaje, incluyendo su localización exacta, su formación, la enorme importancia que tuvieron en el pasado, sus sendas y también las especies que puedes ver por allí, entre otras cosas.
Todo sobre Las Médulas
Si vas a visitar este lugar, debes saber todo esto:
- Localización
- Cómo se formaron
- Importancia en el pasado
- Las sendas
- Flora y Fauna
Localización de Las Médulas
Este paisaje único está en la frontera de León con Galicia, cerca de la ciudad de Ponferrada y la localidad de Orellán. Para ir desde León, tardarás unas 2 horas si quieres evitar los peajes.
Sal de la ciudad por el norte en la CL-623, recorriéndola hasta llegar al desvío por la LE-460 a la izquierda. Por esta carretera vas a cruzar muchas localidades como Rioseco de Tapia, Callejo de Ordás o Escuredo, entre otras. Sigue la carretera hasta llegar a la gasolinera de Manzanal del Puerto, donde cogerás el desvío por la autovía A-6.
A la altura del Monasterio de Santa María de Carracedo, toma la salida 400 para coger la carretera N-120, que te llevará a Carucedo. Una vez allí, toma la CV-191-2 hasta llegar al lugar, que tiene un aparcamiento, un complejo rural y un hotel.
Cómo se formaron
La formación de Las Médulas tiene su origen en una explotación romana de oro a cielo abierto, aproximadamente en la época del emperador Octavio Augusto. A pesar de que la mina ya fue explotada por los indígenas, fueron los romanos los que lo popularizaron, extrayéndose hasta la caída del imperio.
Se utilizaba el método llamado Ruina Montium, donde se reventaban las montañas y se recogía oro en polvo. Al mismo tiempo, se excavaron canales en las rocas para traer el agua de las montañas, utilizando el agua en tromba para explotar la montaña en galerías sin salida.
Finalmente, se lavaba la masa de arcilla y agua resultante en canales de madera, filtrando con rama de brezo para extraer el oro. Removiendo 100 millones de metros cúbicos de tierra, se consiguieron 5000 kilos de oro. Las montañas explotadas eran muy grandes, pero ahora han sido reducidas a las pequeñas colinas o picachos que vemos hoy en día.
Al abandonar la explotación, empezó a haber mucha más vegetación autóctona, creándose así el paisaje que conocemos hoy en día. El agua del lago de Carucedo, situado en las proximidades, se quedó ahí por el estancamiento de agua en la explotación minero.
Importancia de Las Médulas en el pasado
El mayor valor de este lugar fue el de la explotación minera del oro, clave en las estructuras sociales y territoriales del imperio. El oro era el material en el cual se acuñaban las monedas. así que eso nos hace hacernos a la idea de su importancia.
En la actualidad, el mayor valor que tiene es turístico, siendo un auténtico motor económico para la zona. Se siguen haciendo trabajos de investigación sobre el lugar, además de actividades de protección, desarrollo y conservación del mismo.
Las sendas
En Las Médulas existen diferentes sendas y rutas de senderismo para visitar, que nos permite ver toda la zona. La Senda de las Valiñas es la más conocida, con 4 kilómetros de recorrido, viendo La Cuevona y la Encantada, además de la fuente de la tía Viviana. Esta senda presenta un desvío hacia el Mirador de Orellán, que también tiene una galería de agua visitable de unos 100 metros de longitud.
También está la Senda Reirigo, de 5,5 kilómetros, una senda perimetral que recorre todo el pasaje con 5,7 kilómetros de longitud y la Senda de los Conventos, con 4,5 km.
Flora y Fauna en Las Médulas
Cuando se acabó con la explotación minera, se llenó de diferentes vegetaciones como encinas, carrascas, robles, escobas o carquesas. También hay numerosos castaños, incluyendo árboles centenarios, que fueron plantados para su explotación económica. Todo combina muy bien con sus arenas rojizas, creando un gran contraste.
En cuanto a la fauna, encontramos jabalíes, corzos, gatos monteses y más de 100 especies de aves en la vertiente del río Cabrera. A orillas del lago Carucedo hay una orquídea única con forma de abejorro en la flor, con el fin de atraer a los insectos y facilitar el proceso de polinización.
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