Fermoselle es un pueblo de la provincia de Zamora.Considerado como la capital de Arribes Del Duero, fue declarado conjunto Histórico-Artístico en 1974, gracias a su vasto patrimonio histórico.
Si quieres conocer esta localidad y visitar su patrimonio histórico, estás en el lugar correcto. Vamos a darte una pequeña guía sobre todo lo que puedes ver en este municipio zamorano.
Conoce Fermoselle
Si vas a visitar esta localidad, deberías pasarte por estos 5 lugares:
- Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción
- Ermitas e Iglesia de Santa Colomba
- Convento de San Francisco
- Castillo de Doña Urraca
- Calles y lugares más emblemáticos
Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción
El primer lugar para ver en Fermoselle es la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Construida originalmente en el siglo XIII, esta iglesia románica se fue transformando a lo largo de la historia, con añadidos de otros estilos arquitectónicos. Del edificio original solamente quedan dos portadas y algún pequeño resto.
Eso incluye un atrio del siglo XVI y portadas de un estilo de transición del románico al gótico. Su planta primitiva también sufrió una alteración en el siglo XVI y otra en el XVIII, cuando se construyeron las cubiertas abovedadas y una cúpula de base ovalada sobre pechinas del crucero. Está considerada como un Bien de Interés Cultural desde septiembre de 2013.
Las ermitas de Fermoselle y la Iglesia de Santa Colomba
La localidad tiene varias ermitas para visitar, como la de Santa Cruz, que viene con estelas romanas y ventana visigoda y la de La Soledad, de estilo románico del siglo XIII. Tampoco puede faltar la Ermita de San Albín, de 1553 y muros de mampostería, la cual da inicio a los encierros de Fermoselle.
Además de las ermitas tienes la Iglesia de Santa Colomba. Situada en la parte alta del pueblo, es una iglesia románica del siglo XII, con forma de cruz latina y arcos de medio punto. Dentro de ella hay que destacar el Cristo del Humilladero en madera del siglo XI.
Convento de San Francisco
Una antigua iglesia románica de Fermoselle sirvió como base para el Convento de San Francisco de 1730. De la antigua iglesia se conservan modillones, los muros de sillería y una imagen del Cristo de Santa Colomba, que podría ser del siglo IX o del siglo XIII.
El convento actual tiene un claustro, una planta cruciforme con presbiterio cuadrado y listo y un campanario. El claustro del exterior actúa como Santuario de Nuestra Señora Virgen de la Bandera, patrona del pueblo.
El Castillo de Doña Urraca en Fermoselle
El Castillo de Doña Urraca es una antigua fortaleza en ruinas del pueblo. Está situada en la parte más elevada del pueblo, siendo un balcón sobre el río Duero. En su día, fue el refugio de los Comuneros sublevados contra Carlos I, siendo destruídos al finalizar la disputa.
Del castillo original apenas quedan restos, quedando algunas murallas, cubos y pequeños restos de la plaza de armas y la torre del homenaje. Sus piedras originales fueron reutilizadas para construir bodegas y casas.
Las calles y lugares más emblemáticos del pueblo
Finalmente, hablaremos de la villa de Fermoselle y de los lugares más míticos para visitar. Visita la Plaza Vieja y el Barrio de las Eras, unidos por La Cuesta del Seco. Cerca de allí está la Calle De La Nogal, una calle de elevada pendiente con fachadas de granito y 2 arcos de medio punto que dan paso a las famosas bodegas del pueblo.
El corazón comercial de la villa era la calle Requejo, que une las plazas de la Fontanica, el Cabildo y la Plaza del Ayuntamiento con su torre del reloj. También hay que destacar la antigua casa de los carabineros a las afueras del pueblo, que servía para vigilar la frontera con Portugal.
Tampoco podían faltar los miradores como el del Torojón, que tiene vistas de todo el pueblo, de los arribes del Duero, del cerro donde está el Castillo de Doña Urraca e incluso de Portugal. Otro mirador es el del ya mencionado castillo, mientras que el mirador de las Escaleras está situado a 3 kilómetros del pueblo, en un gran espacio natural y al que se accede por el camino del mismo nombre.
Finalmente, destacar el mirador de Las Peñas, el mirador de los Barrancos y el mirador del Terraplén. Todos ellos permiten ver diferentes partes del casco urbano, los campos de cultivo y el paisaje colindante del mismo.
