Viajar en el tiempo es posible en lugares como Calatañazor, un pueblo de la provincia de Soria donde te sentirás como si te hubieras transportado a la Edad Media paseando por sus calles. Con una población de 51 habitantes, es un destino estupendo para disfrutar de una escapada rural. Está situado en la comarca de las Tierras del Burgo y, a pesar de su pequeño tamaño, cuenta con un patrimonio histórico, cultural y natural muy rico. Además, es un lugar estupendo para degustar la gastronomía soriana más tradicional.
Parece que en Calatañazor no ha pasado el tiempo, y todo recuerda a una villa medieval: las callejuelas empedradas, las casas con paredes de barro y mampostería de piedra, las cubiertas de teja con chimenea… Fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en el año 1962.
¿Qué ver en Calatañazor?
Calatañazor fue fortificado a principios del siglo XII, en la época de Alfonso I El Batallador. La muralla se conserva en gran parte del perímetro, y rodeaba toda la villa adaptándose al cerro sobre el que se asienta.
El principal emblema de la localidad soriana es su castillo, cuya construcción se remonta a los siglos XIV y XV. Una fortaleza medieval que a lo largo de la historia ha estado en manos de personajes muy importantes como María de Molina, los Padilla o los duques de Medinaceli. Se dice que Almanzor sufrió su primera derrota contra las tropas cristianas en la villa en el año 1002. De ahí el dicho popular que dice: «en Calatañazor perdió Almanzor el tambor».
En la actualidad la muralla y las principales construcciones de la fortaleza se encuentran en ruinas, pero la visita al complejo defensivo merece mucho la pena. Además, desde él hay unas vistas increíbles de Calatañazor y del Valle de la Sangre.
En el casco antiguo del municipio se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora del Castillo, de estilo románico, y en la parte alta la Ermita de Nuestra Señora de la Soledad. Ambos templos son muy interesantes.
Fuentona de la Miel
A escasos cinco kilómetros de distancia de Calatañazor se encuentra el Monumento Natural de La Fuentona, uno de los espacios naturales más bonitos de Castilla y León. Se trata de una surgencia de agua cristalina que toma tonos de color verde esmeralda, formando una laguna preciosa. En el interior del parque hay aparcamientos habilitados, de manera que el acceso es muy sencillo. Desde los aparcamientos, el sendero hasta la laguna es liso y sin complicaciones, apto incluso para los más pequeños. El recorrido es una verdadera experiencia para todos los sentidos, cruzando bosques, pasarelas, puentes y paisajes de ensueño.
Sabinar de Calatañazor
Más allá de los monumentos del pueblo soriano, la escapada merece la pena por el entorno natural. A mitad de camino entre Calatañazor y La Fuentona se encuentra el Sabinar de Calatañazor, una verdadera joya natural. Aquí se encuentran algunos de los ejemplares de sabina de albar más altos y longevos no sólo de Castilla y León, sino de toda España. Algunos árboles alcanzan los 20 metros de altura y tienen 40 0 años de antigüedad.
Monteagudo de las Vicarías
Si quieres conocer en profundidad la provincia de Soria, te recomendamos hacer una parada en Monteagudo de las Vicarías, a 100 kilómetros de distancia de Calatañazor. Su monumento más destacado es el castillo, levantado por Juan Hurtado de Mendoza en la primera mitad del siglo XV.
También es de especial interés visitar la Iglesia de Nuestra Señora de la Muela, cuyo origen data de finales del siglo XV. En su interior alberga un retablo renacentista del año 1633.
Gastronomía típica de Soria
La provincia de Soria esconde auténticos tesoros como Calatañazor. El entramado de casas desprende un sabor medieval que te atrapará desde el primer momento. Además de los atractivos históricos, culturales y naturales del municipio, te aconsejamos hacer una parada para degustar los platos más típicos de la gastronomía de la provincia:
- Torreznos: es uno de los productos sorianos más famosos en el mundo entero, y también uno de los más consumidos. Son tiras de panceta fritas, y tienen un sabor exquisito siempre y cuando se elaboren de la forma adecuada.
- Migas de pastor: son típicas en diferentes puntos de España, aunque con diferencias en su elaboración. En Soria se preparan con pan seco, panceta adobada, chorizo tierno, ajo y sal.
- Caldereta: y, por último la caldereta soriana que, siguiendo la receta tradicional, se elabora con carne de cordero. Además, se añaden otros ingredientes como pimiento, cebolla, tomate, guindilla, ajo y sal.
¡Disfruta de tu escapada rural a Calatañazor!