La concatedral de Soria (mal llamada la catedral de Soria) o de San Pedro, es un edificio del siglo XVI. Construído como colegiata y declarado Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural, mezcla a la perfección el Románico y el Gótico en un edificio único que es la principal atracción de la ciudad.
Si vas a visitar Soria, no te puedes perder su concatedral, ya que tiene muestras de arte románico y otros elementos del gótico y el barroco. Hoy veremos todo sobre ella, incluyendo el exterior e interior, además de la historia. Asimismo, revelamos por qué no se llama “Catedral de Soria”.
Todo sobre la concatedral más conocida como catedral de Soria
Si vas a visitarla, debes saber lo siguiente:
- Historia
- Arquitectura exterior
- Interior y claustro
- ¿Por qué no se llama Catedral de Soria?
Historia de la llamada catedral de Soria
La historia de la concatedral comienza en la Edad Media. Cuando Alfonso I el Batallador repobló Soria en el siglo XII, se construyó una iglesia rústica, de la cual apenas se conservan restos. Unos años después, se elevó la iglesia a la categoría de colegiata y se construyó una iglesia monacal románica en su lugar en el mismo siglo.
El segundo edificio se construyó con un gran claustro y tres naves, con transepto de 35 metros. Sin embargo, en el siglo XVI, la iglesia se desmoronó al quitar un pilar, así que se reedificó para crear la actual concatedral (inicialmente colegiata).
Los maestros Juan Martínez Mutio y San Juan de Objeto reedificaron el edificio como un lugar renacentista y gótico, reutilizando lo que se pudo de la iglesia destruida y tomando de modelo la Colegiata de Berlanga de Duero.
Arquitectura exterior de la concatedral de Soria
El actual exterior está dividido en varias portadas. La sur es románica, con una portada plateresca y dos pilastras de origen corintio con decoración a candelieri. La Puerta Santa fue su entrada principal, pero el cambio urbanístico pasó a ser considerada la puerta de atrás.
Para ir al claustro, hay que ir a una portada junto a la torre, que es de arco de medio punto con dos columnas acanaladas. Además, se puede ir desde el interior de la iglesia. La torre campanario es de sillería y planta, articulada sobre un pilar central. De ahí destacan las campanas, que muchas son anteriores al siglo XVIII, siendo bienes muebles de interés cultural.
En el exterior se pueden ver algunos restos de la iglesia derrumbada, que se integraron en la actual. Por ejemplo, se conservan varias ventanas y los decorados, de origen románico.
Interior y claustro en la mal llamada catedral de Soria
Entrando a la catedral de Soria encontramos una planta de cinco naves con bóvedas de crucería góticas. El interior tiene varias capillas, destacando la Capilla Mayor, con un retablo mayor de estilo romanista del siglo XVI. También están las capillas de San Nicolás, San Miguel, San Saturio, Santísima Trinidad, Santo Entierro, Nuestra Señora del Azogue, Nuestra Señora de Guadalupe y Santa Catalina.
Sin embargo, lo más importante es el claustro románico del siglo XIII. Se conserva la crujía norte al completo, con decorados vegetales, leones y varios santos a lo largo de 30 metros. De la este quedaron 24 metros, mientras que de la oeste quedaron 23. El claustro posee varios restos pictóricos, de los cuales se conservan algunos vestigios.
¿Por qué no se llama catedral de Soria?
Para los no entendidos, sonará raro el nombre de concatedral de Soria en vez de catedral, pero tiene una explicación. La razón es que la catedral es la iglesia principal de la diócesis, llamada así por tener una “cátedra” (asiento del obispo).
En el caso de Soria, hay una rivalidad histórica con la catedral del Burgo de Osma, por ver quién obtenía la sede catedralicia. Inicialmente, se consideraba una colegiata, siendo concedido el rango de catedral por Clemente IV en el siglo XIII. Sin embargo, desde Osma protestaron y se denegó. Después de los derrumbes y reconstrucción, se siguió intentando durante siglos.
Al final, el 9 de marzo de 1959, el Papa Juan XIII otorgaría una Bula papal, para que fuera una Concatedral. De este momento, comparte sede catedralicia con el Burgo de Osma y tiene esa denominación, no llegando a ser catedral, título que sí tiene la otra sede.
¿Qué te ha parecido la no catedral de Soria? ¿Crees que se merece el título de catedral? En cualquier caso, desde Dónde Comer Sano te recomendamos visitarla y conocer sus grandes encantos. También puedes aprovechar e ir al Burgo de Osma, para decidir con cuál de las dos te quedas.
