Cabezón de Pisuerga es una localidad de la provincia de Valladolid. Situada a 18 kilómetros del centro de la capital, es conocida por sus bodegas, su paisaje y por su proximidad al río Pisuerga, que ha hecho que sea protagonista en la historia de España desde tiempos de los romanos, principalmente por ser un gran lugar estratégico.
Hoy en día, todavía hay muchísimas cosas para ver, sean cuales sean tus gustos. Bodegas, iglesias e incluso una senda con unas vistas magníficas que te encantarán. Si quieres conocer más sobre esta localidad, vamos a darte una pequeña guía sobre qué ver aquí, incluyendo los lugares imprescindibles de la misma.
Todo sobre Cabezón de Pisuerga
Para guiarte en tu travesía a esta localidad, necesitarás la siguiente información:
- Cómo llegar
- Puente romano
- Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
- Senda Los Cortados
- Otras cosas para ver
Cómo llegar
Llegar a Cabezón de Pisuerga es realmente sencillo desde Valladolid, ya que están a tan solo 13,3 km. Tan sólo tendrás que coger la carretera VA-113 y llegarás del tirón. Por si fuera poco, tiene estación Renfe que comunica directamente con la de Valladolid, además de otras como Palencia o León.
Si vas en coche desde Palencia, tendrás que coger la A-65 hasta la salida 109, a la altura del Monasterio Cistencense de Santa María de Palazuelos. Coge la carretera VA-113 y llegarás hasta el municipio.
Puente romano de Cabezón de Pisuerga
El puente de la localidad es una de sus señas de identidad. De origen romano, es un puente de nueve arcos hecho en sillería de piedra caliza. Si has ido por carretera, has tenido que pasar por allí, ya que forma parte de la VA-113.
A pesar de su origen romano, fue reformado en la Edad Media por los Reyes Católicos, ya que un arco se estaba cayendo. Se siguió reformando en siglos posteriores, con una gran reforma en 1777 y la reparación del tercer ojo en 1812 tras la Guerra de la Independencia.
En la actualidad, está abierto al público, pero no sin problemas. Se reformó en 1999 tras el accidente de un tractor y en 2015 se repararon las grietas en su estructura y se reparó un derrumbamiento de parte de la mampostería y la barandilla.
Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción
Una parte importante del patrimonio histórico de Cabezón de Pisuerga es la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Es un edificio creado en la primera mitad del siglo XVI, con reformas efectuadas en los dos siglos posteriores.
Esta iglesia es de una sola nave, destacando el sepulcro gótico de Don Pedro Fernández Bravo y el órgano barroco del siglo XVIII de Francisco Ortega Pérez. Además, hay que destacar los retablos de Ventura Ramos del siglo XVIII y la talla de la Virgen del Manzano del siglo XIII.
Senda Los Cortados de Cabezón de Pisuerga
Uno de los lugares más espectaculares de la zona es la Senda Los Cortados. Con una distancia de 7,67 km y dificultad baja, la cual recorre las cuestas, el valle y los páramos de la zona. Comienza en la zona de las bodegas, pasando al ascenso del Cerro de Altamira por el oeste, en una zona de pinos carrascos.
Allí llegaremos a un cerro, el cual antiguamente tenía un castillo, ya desaparecido. La vista es espectacular, mostrándonos los Montes Torozos y la vega del Pisuerga. Si sigues por el sendero, llegarás a los cortados, unas formaciones hechas por el río y que llaman mucho la atención en el paisaje. Después, se baja por el otro lado, ya que es una ruta circular, la cual te llevará al inicio de la ruta donde podrás ver el pueblo desde arriba.
Otras cosas para ver
En Cabezón de Pisuerga hay más cosas para ver además de lo ya mencionado. El monasterio de Palazuelos, situado a las afueras del pueblo y originario del siglo XIII, se está restaurando.
En la Senda de los Cortados se pasa por el barrio de las bodegas, el cual merece la pena visitar por su importancia histórica. No te puedes perder las casas cueva, el canal de Castilla, la ribera del Pisuerga y las casas blasonadas de la localidad. Asimismo, hay otras muestras como los restos de la villa de Santa Cruz de origen romano, los vestigios del antiguo castillo medieval ya desaparecido y la placa de la visita de Felipe II y María Luisa Gabriela de Saboya.
